Mis dibujos son resultado de una vista afectada por la miopía, por una serie de manías y obsesiones, por preferencias y fobias, por el amor y el odio que me despiertan las cosas; en fin, por lo que yo soy y por lo que los objetos y las personas significan para mí en este instante, expresado con lo que el material que esté usando me permita decir.
Para experimentar el mundo no poseemos más que nuestros sentidos y tendremos que escucharlos aunque muchas veces nos den «malos» consejos porque es el único modo de hacer saber a los demás la forma particular en que percibimos al mundo.
Eduardo Cohen
p.185. UNAM, 1993, México